en una rutina de escribir unas líneas todos los días como la que me ocupa, hay líneas más interesantes y otras mucho menos, y la mayor parte de ellas pasan des-apercibidas, y al de un tiempo ni yo mismo las recuerdo,
no va a pasar esto con la fábula del buey solo y la sopa de piedras,
una fábula que habla de nuestra capacidad de convocar a un grupo de personas desde un espíritu horizontal, en el que todas somos iguales diferentes, y aportamos desde ahí, desde nuestra singularidad y nuestra voluntad de aportar,
es curioso cómo hoy me levanto pensando en esta fábula como parte de un proceso de cierre de un proceso que estamos llevando a cabo en calidad Pascual, donde Gaizka y yo estamos acompañando a un grupo de personas,
que forman parte de una red informal de gestores del cambio, personas que están implicadas desde diferentes niveles y espacios de la organización en el cambio organizativo, del que todas somos parte,
o consagramos lo existente, solidificándolo, o aportamos cosas nuevas, en una propuesta de refresco, regeneración y TRANSformación, acercándonos juntas a lo que está por venir, una idea que está en relación con el título del proceso que nos une,
liderando desde el futuro emergente,
es curioso que 7 años después de escribir esta entrada, que publico el 17 de abril del 2013, hoy siga más vigente que entonces, y dé pie a un proceso de indagación, porque estamos cerrando ya el proceso que convoca al grupo allá por setiembre,
son ya más de 3 meses con reuniones, conversaciones, círculos de coaching, en los que hemos compartido experiencias profesionales, personales, conocimientos, lecturas, videos, pensares – sentires – haceres, un mundo de cosas,
y nos llega el momento del cierre, un momento que muchas veces es demasiado apresurado, cerramos una carpeta para adentrarnos en otra, o en otras 2 o 3 que se acaban de abrir, si no están abiertas ya y en retraso,
es curioso pero a veces, muchas, más de las necesarias, corremos y no paramos de correr como pollos des-cabezados, no es de extrañar que con esta actitud, convertida en hábito, no paremos de correr y de llegar tarde,
es buen momento para parar en un proceso que muchas metodologías enuncian, pero que a veces no desarrollamos, es el momento de la cosecha, se trata de parar y reflexionar sobre lo que ha funcionado y lo que pudo funcionar mejor,
pero sobre todo lo primero, si queremos que el proceso se cubra de una pátina apreciativa, que nos va a potenciar en lo siguiente que hagamos a continuación, como personas independientes y como personas en relación,
porque apreciar es amar,
por eso vamos a compartir esta fábula con este grupo, a los que le vamos a pedir esta vez algo nuevo, no queremos que nos aporten más patatas y más zanahorias, caparazones de pollo o cominos para la próxima sopa de piedras,
sino que reflexiones sobre las características de las piedras que han acompañado el guiso, cada una de ellas tan diferentes, porque no hay dos piedras iguales, aunque vengan de la misma beta de mineral, en el mismo estrato de la misma montaña,
es la magia de la vida, que se expresa aquí y allá.
cuando apreciamos las características fundamentales de las piedras que van a conformar la base de la sopa de piedras, así como del agua de la fuente, del fuego, del caldero y la cuchara,
vamos a poder reproducir el proceso, que va a calentar las voluntades de las personas ahí presentes, en ese proceso de abrirse para compartir, desde su autenticidad, desde la verdad que son, y que sus vidas expresan,
desde esas historias que tanto hablan de ellas, convertidas en nosotras, porque el facilitador pasa a ser parte del grupo, ahora ellas son tmbn facilitadoras de esos cambios, agentes de TRANSformación que operan desde el futuro emergente,
por medio de historias que TRANSforman a las personas en relación, al grupo, en proceso de convertirse en equipo, a la organización, a la sociedad, al mundo, las historias compartidas que nos han TRANSformado.
se me ocurre un ejercicio que va a estar protagonizado por unas pocas piedras, la piedra que le regalamos a Joseba, promotor del proceso, formulada más o menos así, «este proceso me ha aportado personalmente …», a rellenar,
una piedra que responde a la pregunta «¿Qué puedo hacer por ti?», esa pregunta salutogénica que no se ha formulado explícitamente en el inicio del proceso, pero que forma parte del lanzamiento del proceso, es buena hora para la devolución,
una segunda piedra que le regalamos al propio proceso, «este proceso ha funcionado para mí porque …», en la que reconocemos los principios de las piedras, del fuego, del agua y del puchero,
y una tercera piedra que vamos a regalar a una persona que nos ha tocado el corazón, que ha sembrado en nosotras una semilla de ilusión, que nos ha re-conectado con la libertad, el amor, la vida,
3 piedras que podemos convertir en 4, 5, 6, 7, hay tantas cosas que agradecer a diferentes personas, piedras que van a conformar nuestro particular hatillo, poca cosa vamos a necesitar para el camino que emprendemos, si acaso un pañuelo y un palo,
caminante, no hay camino, se hace camino al andar, en esta vida curiosa, hay fábulas que vencen el juicio del tiempo, otras no, pasará nuestra vida y pasarán nuestros hechos, nuestros pensamientos y nuestros sentires,
y las piedras permanecen.
y tú, ¿honras las piedras del camino?
en el mundo material, dar es perder, mientras que en el mundo espiritual dar y compartir es recibir, es por eso que la persona que más da es la más rica, una interpretación que es evidente en el caso de las piedras,
porque el hatillo de piedras que se forma en un grupo lo comparten todas las personas que conforman el grupo, es la magia de la multiplicación, ya conoces la fábula de los panes y los peces, otra de esas fábulas que cruzan el juicio del tiempo,
aunque no sólo de pan y peces vive el hombre, ni de piedras preciosas la mujer.
porque un día imaginamos ecosistemas en los que el ser humano puede florecer, desde su desarrollo profesional, ya sea en el ámbito social, en el cole o en el corporativo, hoy compartimos entornos de confianza.
desde organizaciones con espíritu y corazón estamos comprometidas en el desarrollo del 3ple camino de las personas, los grupos y las organizaciones, con 3 conjuntos de capacidades que quedan representadas por 3 palabras,
curiosidad– empatía– coraje,
3 palabras que sintetizan 3 aperturas, apertura de mente, de corazón y de voluntad, 3 palabras que resumen 3 grupos de características, relacionadas con 3 ámbitos de desarrollo personal, de los grupos y de la organización, ya que
- la curiosidad es la llave de la creatividad grupal en organizaciones innovadoras,
- la compasión es puerta de los grupos saludables y de organizaciones sanas,
- el coraje es la llave de la responsabilidad en organizaciones excelentes.
7 emociones es un modelo de responsabilidad emocional cc inspirado en el arco iris, en la teoría del color de Goethe, en la teoría U de Otto Scharmer, un modelo que compartimos desde este enlace.
te deseamos amor y orgullo sano para el desarrollo de entornos de confianza, y te mandamos 3 abrazos, plenos de curiosidad, compasión y coraje, que el camino nos encuentre,
feliz 2020 y buen camino.